Gemosclera es una asociación que conoce sus limitaciones y la situación económica actual en la que se desenvuelve. Por ello mantiene una estrategia de consolidación financiera que le permite asegurar un crecimiento estable, serio y fiable, basado en:
- Un sistema de calidad propio para los procesos, que será adaptado en cada momento a las necesidades de Gemosclera, y en el que se definirán las líneas de actuación en las diferentes actividades. De este modo, se aseguran y mantienen los niveles de calidad establecidos, con el objetivo de satisfacer las necesidades y expectativas de los usuarios.
- Relaciones reguladas con nuestro público objetivo (clientes), de forma que se lleven a cabo dentro de los marcos de relación adecuados a las circunstancias particulares de cada caso. Para ello, se establece un modelo de relación en cada colaboración o actividad, asegurando la calidad en la prestación de servicios, facilitando el control por parte de la entidad y proporcionando información eficaz para la toma de decisiones, de forma que el seguimiento de indicadores de consumo y calidad óptimos.
- Una política de gasto contenida en la que se evitan inversiones superfluas e innecesarias. Recurriendo a los patrocinios en lo que respecta a la contratación de servicios externos, previa a la inversión directa de activos. Como muestra representativa de esta política, hay que destacar las infraestructuras tecnológicas y el material de buceo.
- Una política de comunicación y publicidad en sus comunicaciones, relaciones públicas, merchandising e identidad corporativa. Este tipo de labores están siempre regidas y cuidadas al detalle con la discreción y prudencia debidas, según nivel de confidencialidad requerido en cada caso.
Una de las principales características que hace viable a Gemosclera son sus socios y colaboradores. Todos ellos, debido a su conocimiento, su experiencia y la aptitud profesional que mantienen en todas sus actuaciones son ser su principal activo. De esta manera, los miembros de la asociación pueden trabajar sin los condicionantes que tendrían en otras actividades desarrolladas con ánimo de lucro y muy acotadas por los costes de producción.
Existen además una serie de acuerdos que hacen que, ante cualquier proyecto, sea necesaria una escasa inversión inicial para comenzar. Entre otros, se incluye el uso de los recursos propios de los socios para la realización de las actividades y una política de gastos basada en no comenzar ni afrontar ninguna actividad si no está asegurada su financiación. Por ello, la actividad básica solo presenta unos costes de gestión muy escasos que podrán ser aportados directamente por los socios en caso de no conseguir patrocinios.
Estos acuerdos se basan en el principio de valoración de los activos intangibles, tales como contactos con la Administración, empresas de turismo sostenible, otras asociaciones y know-how, que aportan los propios socios y que son fundamentales para la viabilidad del proyecto.
Gemosclera se encuentra en un período de consolidación de actividades para madurar el emprendimiento y consolidar el proyecto. Ya se ha conseguido estabilizarlo y que sea reconocido por su profesionalidad, demostrando un crecimiento continuado y mantenimiento de los niveles de calidad planteados inicialmente.
El plan de viabilidad se basa en el mantenimiento operativo de la asociación, asegurando su liquidez desde el inicio, mediante la reducción de costes de mantenimiento de sus servicios con la búsqueda de patrocinios y diseñando las actividades de tal manera que sea imposible tener descubiertos imprevistos de tesorería.
Además, por las propias características de los servicios prestados por la asociación, se plantea una política muy meditada de incremento de gastos, que viene determinada por la evolución de los servicios prestados y no por estimaciones ajenas a su realidad.