Después de estos duros meses de confinamiento en los que no hemos parado, desde casa pero siempre activos, hemos vuelto al campo y lo hemos hecho en uno de nuestros sitios favoritos, Ruidera. Tres meses desde la última vez que buceamos nos reencontramos y retomamos nuestros trabajos, celebrando además que hemos superado estos meses sin problema.
No hemos desaprovechado el primer sábado en el que nos han permitido movernos de provincia, teníamos parado el trabajo de campo desde principios de marzo y había que retomarlo, además ya teníamos muchas ganas de vernos porque ante todo somos amigos.
Decidimos acercarnos a Ruidera para retomar los trabajos de control de fondos que estamos llevando a cabo en varios humedales. Con este proyecto se pretende mantener una red de control temprano del estado ecológico basada en una metodología propia, la evaluación de las masas vegetales subacuáticas en los fondos del Parque Natural de las Lagunas de Ruidera.
Salimos temprano unos desde Madrid y otros desde Córdoba y nos encontramos directamente en la laguna Tinaja, bajo el cerro del Almorchón. Esta vez nos acompañaba además Miguel, medio suizo y medio cordobés con el que ya habíamos coincidido en otras actividades y que esta vez nos iba a echar una mano debajo del agua, esperamos contar con él en futuras ocasiones.
Con un día tan caluroso no nos entretuvimos mucho, además, tal y como fuimos viendo después, la gente no tardaría en invadir el Parque.
Mientras nos cambiamos fuimos comentando los trabajos que habíamos planificado, para examinar en vaso de la laguna más próximo a las antiguas instalaciones de la central de Ruipérez.
Encontramos una laguna con un fenómeno blanco, más acentuado en unas zonas que en otras, cambiando la visibilidad que, aún así no fue muy mala, lo que nos permitió recorrer todo el vaso de la laguna. Tras dos inmersiones y casi dos horas debajo del agua dimos por finalizados los trabajos.
Recogimos el material comentando todo lo que habíamos visto, aún nos quedaban cosas por hacer, queríamos subir al cerro del Almorchón a comer y a enseñarle a Miguel las bonitas vistas, y después acercarnos a ver a nuestro amigo José Luis Zafra en el Centro de Información del Parque.
La próxima vez que salgamos al campo, muy probablemente sea en Castilla y León. Atentamente
Gemosclera.